“Tengo derecho a hacer ajustes en el equipo. Así, el contralor Jorge Bermúdez justificó ante la comisión de Constitución el despido de 3 funcionarios de la Contraloría General de la República que denunciaron una persecución política.
El contralor calificó la denuncia como un intento de relacionar la desvinculación con una represalia, argumentando que el caso evidencia que “se están utilizando mal los mecanismos de la Contraloría”.
A modo de ejemplo, Bermúdez planteó un escenario hipotético, en que un ministro del Interior le dijera al Presidente de la República que no puede despedirlo “porque lo denunció por corrupción”. En tal caso -sostuvo- cualquier personas estaría de forma vitalicia en su cargo. “Nos basta con un solo funcionario vitalicio en la contraloría”.
Fue el propio contralor quien personalmente pidió ser invitado a esta comisión para explicar la situación, después que lo acusaran de haber despedido a funcionarios que dicen haber denunciado una disparidad de criterios en las auditorías de municipios.
Luego de su intervención, el diputado Jorge Alessandri (UDI) pidió invitar a Patricio Barra, uno de los funcionarios desvinculados, para escuchar su versión. Sin embargo el presidente de la comisión, el DC Matías Walker, dijo que esa convocatoria no es posible de acuerdo al reglamento.
