MORENA y el 2021.- La Opinión de Javier Lozano

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Lo que hoy vive México política y electoralmente, se traduce al amplio margen con que el partido regeneración nacional, ha estado ganando impulso y terreno en la geografía nacional. La realidad a priori mostraba, que MORENA no figuraba en algunos estados en las pasadas elecciones, sobre todo en el norte del país. Sin embargo, la pasada elección del 2018, nos dejó una evaluación con proporciones especialmente cargadas al partido del hoy presidente.
 
Es evidente que la respuesta que ha tenido el mandatario se fundamenta en dos estrictas concepciones; la larga era que protagonizaron el bipartidismo político del PRI y PAN, quienes capitalizaron el enojo y el andamiaje extenso de reacciones por el rechazo de muchos segmentos de la sociedad. La segunda, en la profunda incursión que hizo Andrés Manuel López Obrador, como figura que supo moverse a través de la perseverancia, pero a través de la organización de muchos cuadros, movimientos y organizaciones sociales que jalaron el voto de los ciudadanos.
 
La pasada elección dejo resultados a posteriori; la lógica apunta a que morena y el efecto de AMLO sigan consolidando el dominio del 2021; empero, la efervescente batería y arrastre que trae MORENA puede producir una oleada de polarización interna si este instituto político no cimienta bien sus principios, y cierra las brechas al oportunismo de muchos actores.
 
¿Qué significa esto?
Que exista una división y desacuerdo de las posibles candidaturas; esto, debilitaría al partido y la sinergia que ha constituido López Obrador. Todo esto es obra de AMLO; él es el principal actor de este fenómeno; el personaje que por más de 30 años intensifico y no claudico ante el embate del sistema; es el arquitecto; la parte sustancia, la representación popular es su figura: el presidente, es el que ha jalado el voto y el arrastre; entonces, lo menos que pueden construir, es una connotación que pondere un programa que establezca un diseño integral. Pero el punto central, es la configuración de una estrategia que posicione los mejores perfiles y antepongan el interés personal, por el del colectivo. Todos van a querer saltar; cuadros, liderazgos, resentidos, oportunistas, actores y deportista; es válido, si se cumple con la norma; pero lo que es incongruente, es que aprovechen la vestimenta de AMLO para posicionarse.
 
En efecto, la naturaleza indica que hay muchas posibilidades que el ascenso de MORENA se extienda en el 2021, la ilusión es mucha; si la rutinaria forma de gobernabilidad se asemeja al viejo régimen, se puede polarizar y fraccionar la intentona. Recuerden que el voto de castigo que se le dio al PRIAN fue por el enfado adhesivo que se arraigó en las instituciones de la función pública.
 
El principal problema de MORENA ante su crecimiento, pudiera ser que produzca cuadros al interior del partido: que fragüen y fragmenten la toma de decisiones; de ante mano sabemos que López Obrador es el presidente, el referente, el ideólogo y la figura principal del partido. En el gira el visto bueno. Entonces, la extensa experiencia y bagaje de AMLO, francamente darán lectura a este tipo de escenarios, específicamente en la designación de candidatos del 2021, hablando en específico de mí estado de Michoacán, donde ya se están perfilando muchos nombres como: Raúl Morón, Cristóbal Arias Solís y el súper delegado Pantoja. Veremos que cual es el desenlace, lo cierto, es que hasta ahora, son solo especulaciones.
 
Por cierto, este domingo hubo una correlación de fuerzas que saltaron a MORENA; en especial de ADN que lidera: Carlos Torres Piña, los cuales renunciaron al PRD hace unos meses. Entre ellos van, diputados “Fifís”de la actual legislatura que han mantenido las viejas prácticas del sistema: beneficiar a grupos selectos bajo las comisiones que presiden, en especial me refiero a Miriam Tinoco, que ha mostrado una insensibilidad con varios medios de comunicación. Aquí los dirigentes de MORENA deben evaluar que estas figuras persisten en la demagoga función que le da ser congresista. Por cierto, esta diputada fracaso en la actual administración estatal en la operación de los programas sociales y educativos.
 
Nos vemos pronto.
 
Saludos desde Morelia.
 
 

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