Bombo Fica en defensa del Museo de Cera: “Creo que el trabajo se hizo con mucho esfuerzo”

El humorista Bombo Fica salió en defensa del Museo de Cera de las Condes que ha desatado fuertes críticas por la manufactura de las esculturas de personajes importantes de la política, el deporte, la cultura y el espectáculo chileno y en una entrevista con el late “Síganme Los Buenos” del canal Vive comentó: “Yo estoy agradecido. Creo que el trabajo se hizo con mucho esfuerzo y no seamos chaqueteros. En este país todos somos chaqueteros”.Lee también: Escultor del Museo de Cera: “Me han tratado como un trapo”El cómico, que cuenta con una figura en el museo, valoró la iniciativa y opinó que Chile “no invierte en este tipo de cosas, menos en su historia (…) y esto es parte de la historia cultural y social de un país, ya sea en lo económico, en lo político, en todo ámbito. El representar la historia transversal de un país, a través de un museo de cera, con todas las imperfecciones que tiene, ya tiene su grandeza por sí solo”.Fica explicó que “el hecho de que mi persona esté ahí y ser reconocido, es más aún para mí. Es un reconocimiento a un trabajo. Y obliga a la gente a sentir un cierto respeto por aquellos que han hecho algo. En este país somos muy irrespetuosos con nuestra historia, ya sea en lo político, en lo cultural. Aquí te tienes que morir para que alguien diga ‘ah, qué bueno era este tipo, qué cosas importantes hizo’. Pero en la vida diaria, cuando tú estás, se preocupan más del detalle del defecto”.En relación a las críticas provenientes de la opinión pública y de algunos personajes replicados en el Museo de Cera, tales como Marcelo “Chino Ríos”, el humorista comentó: “Le digo a la gente que no se confunda, que no acepte estos comentarios simplones, mediocres (…) Vuelvo a insistir, somos un país mediocre, un país rasca en eso”.Lee también: Despiden a escultor que creó las cuestionadas figuras del Museo de Cera de Las CondesEl artista también llamó a visitar la galería y mencionó que “es bueno que se hagan una mirada objetiva, mirando el museo, más allá de lo que pueda decir cualquier tipo que se haya sentido ofendido, y no haber reconocido el hecho de estar allí. Lo que pasa es que la soberbia nos come”.

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