La sensibilidad al ruido es la forma más común de ansiedad en perros, sin embargo, no es la única: la agresión, la ansiedad por separación y el miedo son otras de las formas que puede tomar. Una nueva investigación, la más grande realizada hasta el momento sobre temperamentos caninos, encontró además que algunas razas son más propensas a estos comportamientos que otras.
Anécdotas sobre el comportamiento de los perros abundan, pero lo que falta son datos científicos confiables, sostiene Hannes Lohi, genetista canino de la Universidad de Helsinki en Finlandia.Por eso, Lohi y su equipo se pusieron en contacto con clubes de raza —clubes de aficionados de una raza de perro única y específica— y se comunicaron con dueños de perros de todo el mundo a través de las redes sociales para pedirles que calificaran su comportamiento en siete rasgos diferentes relacionados con la ansiedad: sensibilidad al ruido, miedo general, miedo a las alturas y superficies (como baldosas reflectantes), falta de atención, comportamientos compulsivos (como persecución de la cola), agresión y ansiedad por separación.Recibieron más de 13.700 respuestas reuniendo 264 razas, pero para hacer comparaciones confiables se limitaron a las 14 razas con 200 o más perros encuestados.
La ansiedad por separación se refiere a cuando un perro está angustiado por estar separado de su cuidador humano principal o preferido.
Los resultados, publicados en la reviste Nature, mostraron que en total, el 72.5% de todos los perros mostraron al menos un comportamiento relacionado con la ansiedad; con la sensibilidad al ruido como la más común en todas las razas y afectando particularmente a los perros más viejos.Por otra parte, alrededor del 17% de los caninos tenían miedo de otros perros, el 15% tenían miedo de los extraños y el 11% tenían miedo de nuevas situaciones. Además, ciertas ansiedades eran más comunes en razas específicas. La sensibilidad al ruido fue más pronunciada en lagotto Romagnolos (un retriever nativo de Italia), Terrier irlandés y perros de raza mixta. Las razas más miedosas fueron los turcos andaluces, los perros Sheltie y las razas mixtas. Por último, casi una décima parte de los mini schnauzers eran agresivos y temerosos con los extraños, pero esos rasgos eran prácticamente desconocidos en los labradores.
En conjunto, dice Lohi, los resultados sugieren un componente genético para estas ansiedades, tal como lo hay en los humanos. Sin embargo, advierte por un lado que la encuesta preguntó solo sobre la frecuencia de los comportamientos, no su gravedad. Por otro, que la categoría de “raza mixta” no tuvo en cuenta el linaje único de cada perro ni que estos comúnmente crecen en refugios, lugares asociados con alta ansiedad; lo que podría influir en el comportamiento más que los genes.Finalmente, explica que identificar qué razas tienen más probabilidades de mostrar diferentes tipos de ansiedad podría ayudar a tomar precauciones para dar a los perros vidas más felices y saludables.
