Con temperaturas altísimas comenzó el 2021 y se espera que esta tendencia continúe. Sin ir más lejos, Accuweather pronosticó para hoy una máxima de 35°C en la capital.
Entre las consecuencias menos deseadas del calor figura un aumento de la sudoración, lo que durante el verano hace que muchos se pregunten si están usando el producto correcto para controlar la transpiración e impedir posibles olores desagradables.
¿En qué hay que fijarse al momento de elegir un desodorante? El dermatólogo y coordinador académico de la Universidad de Santiago, Francisco Chávez, explicó que “hasta hace algunos años, los desodorantes eran netamente un aparato cosmético diseñado para entregar cierto aroma a la piel axilar y no tenían mucha más acción que eso”.
Sin embargo, el médico sostuvo que a medida que ha ido avanzando la ciencia, “a los desodorantes se les han ido agregando algunas sustancias químicas que permiten dos cosas: Por un lado, disminuir la liberación de sudor a través del conducto de las glándulas sudoríparas, lo que se logra principalmente agregando sales derivadas de aluminio a los componentes de estos productos, que con esto pasan a ser desodorantes antitranspirantes. Y por otro lado, a algunos desodorantes se les han añadido compuestos que actúan para controlar la flora bacteriana que normalmente hay en la piel axilar, formada principalmente por la llamada corine bacterium, que al proliferar más de la cuenta produce el mal olor en las axilas, conocido como bromhidrosis”.
Entonces, dijo el experto, “actualmente hay dos grandes grupos de desodorantes: los que aún cumplen una función básicamente cosmética (generar cierto aroma) y los que tienen algún efecto de control (de sudoración y/o mantención de la flora bacteriana)”. Tomando en cuenta esto, las personas pueden tener una noción de qué es lo que necesitan.
Uso del desodorante
“El uso correcto del desodorante es el que se le da cotidianamente, es decir, una vez al día como mínimo. Pero si hay personas que quieren aplicarse más, sobre todo por el aroma, se pueden aplicar dos o tres veces al día. La única contraindicación es que la persona tenga algún grado de hipersensibilidad en la piel, o sea cierta tendencia a la dermatitis. Ellos deben usar desodorantes especiales, de líneas dermatológicas”, dijo Chávez.
En cuanto al mejor momento para aplicarse el producto, la dermatóloga de la Clínica Alemana, Lorna Velásquez, afirmó que es “en la noche, con la piel seca y la cantidad debe ser sólo la suficiente para cubrir la superficie de la axila”.
Barra, spray o roll on
“El formato de presentación se puede elegir según la practicidad de aplicación y si manchan o no la ropa”, agregó Velásquez. Aunque según Chávez, “el vehículo más efectivo es en barra, pero suele ser más sucio. El spray y roll on son un poco menos efectivos, pero cosméticamente más agradables”.
Problemas mayores
Cuando la bromhidrosis es importante e incomoda a las personas, Velásquez sugiere ir a ver a un especialista. En este caso, “el tratamiento médico con antibióticos tópicos debería ser suficiente”, manifestó.
Si el problema responde a la hiperhidrosis (sudoración excesiva), la doctora aconsejó “recurrir a tratamientos altamente efectivos como la inyección intradérmica de toxina butolínica, que disminuye la transpiración entre seis y nueve meses”.
