Alberto Fernández retornó a Argentina luego de sus pasos por Rusia y China, que no cayeron del todo bien en los Estados Unidos, y la principal tarea que tendrá el presidente será la de resolver un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, ante el curso de las negociaciones que se mantienen.En este sentido, recibió en horas de la mañana al ministro de Economía, Martín Guzmán, y luego arribó a Casa Rosada donde se sumó a las conversaciones Jorge Argüello, otro de los que está embarcado en las charlas con el Fondo y embajador argentino en Washington. La negociación abierta que el Poder Ejecutivo necesita de detalles claves para que se cierre el contrato con el organismo internacional, que en las últimas horas dijo que quiere cerrar el entendimiento lo más pronto posiblea través de la palabra de Gerry Rice, su vocero oficial, que se mostró optimista.
Por otro lado, el Gobierno tiene el desafío en el Congreso Nacional de aprobar el acuerdo en ambas Cámaras y tener una ley aprobada antes del próximo vencimiento con el Fondo, previsto para el 22 de marzo, por un monto total de 2800 millones de dólares.En cuanto al apoyo del arco político, en la jornada de ayer se llevó a cabo una nueva reunión de la Mesa Nacional de Juntos por el Cambio y a su salida adelantarón que el bloque acompañará el proyecto “para evitar el default”, aunque estableció sulímite en el aumento de impuestos y tarifas.
Alberto Fernández, por su lado, busca cerrar esta historia y en sus viaje a Rusia, principalmente, aseguró que su gobierno deberá trabajar a “destajo” para salir de la dependencia de Estados Unidos y del FMI, algo que fue criticado por el Kremlin.Por último, con el afán de alentar las negociaciones, Guzmán le informó al Presidente que suspenderá el viaje que tenía previsto a Indonesia, en la cumbre de ministros de Finanzas en el marco del G20 (15 y el 18 de febrero) y aseguran que tiene que ver con la presencia de funcionarios de segunda línea que no son prescindibles para las charlas de Argentina.
