Colo-Colo está muy cerca de obtener el título. Claramente ha sido el equipo más regular del torneo y ha logrado marcar las diferencias restando seis fechas por jugar. El equipo de Quinteros la parecer, aprendió las lecciones de la temporada anterior, cuando a falta de cinco fechas, le gana a Universidad Católica, sacándole cinco puntos de ventaja. No lo han reconocido abiertamente, pero esa tarde se sintieron campeones y la realidad fue otra, porque el equipo cruzado arremetió con todo y aprovechando los errores y cierto relajo de los albos, para obtener el tetracampeonato.
Pero ahora, la lección de humildad y no confiarse pareciera estar aprendida y recalcada a cada momento. Sin las Universidades como posibles rivales directos y más allá de las buenas campañas de Ñublense y Curicó, los albos no han tenidos rivales que los amaguen es soñar con la estrella 33.
Gustavo Quinteros entendió y decidió reforzar con calidad. Los jugadores que trajo fueron aciertos plenos, especialmente los arribos de Pavez y Lucero. El volante mixto se ha transformado en pieza clave de la zona media, junto con generar por mucho tiempo del torneo una dupla sólida junto a César Fuentes. Lo de Juan Mafrtín Lucero es un golazo. El delantero argentino, que vino con algunas dudas, es sin duda, el jugador más determinante del equipo, no solo por los goles, sino también por sus características de juego. Lucero se extraña en el juego cuando ha estado ausente. El trasandino está entre los tres mejores futbolistas del torneo y le disputará palmo a palma el título goleador a Zampedri.
Si uno revisa detalladamente los partidos de los albos, más allá de tener tres derrotas, los análisis del juego deben basarse en cómo se jugó, bajo qué términos se impuso el rival o como lograron neutralizar el poderío de los albos. Hasta ahora, ningún rival ha sometido o ha logrado pasar por encima de los blancos. Es Colo-Colo el equipo que generalmente está tratando de proponer. Una escuadra que ya suma 46 goles a su favor y tan solo 15 en contra.
Y aunque perdió a un jugador importante en el esquema, como era Pablo Solari, se las sigue arreglando para llevar la delantera y tener nueve puntos de distancia. Otro que ha crecido mucho en esta versión 2022, es Gabriel Suazo, dueño de la banda izquierda y seguramente, el lateral zurdo de más cercana titularidad en la Roja.
Quintero es un técnico de mil batallas y sabe que este título no se le puede escapar. Las “farras” de Libertadores y Sudamericana, calaron hondo seguramente en lo más íntimo del estratega. Por eso y con el panorama actual, incluso dándose algunos resultados, los albos podrían levantar la ansiada y anhelada corona tres fechas antes del término.
Tal vez, el asunto más pendiente y que por ahora, lo lleva de manera casi indiscutible es la consolidación de valores jóvenes. Colo-Colo los tiene de sobra. Y si bien muchos de ellos han tenido las oportunidades, el técnico entiende por muchos momentos y más allá de la regla, que los jugadores grandes son los encargados de llevar el buque adelante.
Colo-Colo avanza firme y seguro a la estrella 33. Ha sido el más regular y eso nadie podrá discutirlo, porque quienes pudieron amargarlo en su momento, les faltó jerarquía y sapiencia para eso.
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