Un 16 de noviembre de 2010, Los Bunkers lanzaron su sexto álbum de estudio titulado “Música Libre”. Se trata de un disco homenaje a Silvio Rodríguez que incluye 12 versiones de la banda penquista interpretando clásicos temas del músico cubano.
Para celebrar y recordar el disco que nos entregó grandes canciones, Mauricio Durán, compositor y guitarrista de Los Bunkers conversó con Iván Guerrero sobre momentos memorables de la grabación de “Música Libre”.
Han pasado 13 años desde que Los Bunkers lanzaron el disco reconocido y elogiado por el mismo Silvio Rodríguez. A pesar de que no lo celebraron, pues ensayan para futuros shows, Mauricio Durán ha reconocido que: “Fue un gusto que nos dimos, volvimos a ser niños, volvimos a la adolescencia, lo atesoramos”, dijo en Un País Generoso.
La dificultades y buenas elecciones tras “Música Libre”
La creación del disco fue una decisión difícil para la agrupación penquista, debido a que había algunos integrantes de la banda más entusiasmados que otros en crear un disco de covers en vez de material propio. Los chilenos comenzaron ensayando una de las canciones del disco y después “quedamos con el bichito ‘puta si hacemos un disco'”, relató el guitarrista.
Afortunadamente, gracias a la ayuda y opinión de amigos, parejas y padres el disco terminó ejecutándose. “Acordamos hacerlo y una vez que lo acordamos le propusimos la idea al sello acá en México. A los sellos les encantan los discos de covers. Debiesen ser entre comillas ‘discos más fáciles de mostrar'”, explicó el músico.
El camino para la realización del disco fue difícil, ya que, a pesar de contar con el apoyo del sello mexicano, tuvieron problemas con el sello en chile manejado por personas trasandinas.
“Los argentinos no creían nada en el disco. En general les interesa desarrollar los productos argentinos. Lo demás le importa un bledo. Tuvimos que pelear mucho para sacar el disco físico”, explicó Mauricio Durán.
Quien salvó la situación fue Carolina Esquivel, según el compositor, fue a ella a quien se le ocurrió sacar el disco y distribuirlo a través de diario. “Salió un fin de semana y sacaron tres mil copias y se vendieron todas. Después cinco mil copias y se vendieron. Cuando los argentinos se dieron cuenta lo sacaron (en físico)”, explicó Mauri Durán.
La versión atípica de Los Bunkers
Afortunadamente, el disco salió adelante y terminó siendo uno de los más vendidos de la época. Para Mauricio es un disco “Un poco atípico”. Ya que “Silvio era muy versionado, pero por gente de su rubro. Las bandas de rock nunca lo mencionaban ni ná”, dijo.
Otra pieza fundamental para la realización del disco fue la producción de Manuel del Real, miembro de Café Tacvba quien no era fanático de Silvio Rodríguez y aportó con el tinte que debían tomar las versiones, que en un principio eran 30.
“Había ciertos temas, ciertas versiones que les veía un potencial musical y estético. La versión de “Pequeña Serenata Diurna” y su clave de cueca a él se le ocurrió”, reveló el músico en Un País Generoso.
