Aunque Shakira dijera en estos momentos: “bruta, ciega, sordomuda, torpe, traste y testaruda”, ha sido inevitable que Fiscales en España la acusaran este viernes de fraude fiscal, quienes aseguran que la cantante colombiana dejó de pagar más de 14,5 millones de euros (16,3 millones de dólares) entre el 2012 y el 2014.
Los cargos señalan que Shakira listó las Bahamas como su residencia oficial para propósitos fiscales durante esos años, pese a que, durante ese periodo “la querellada no estuvo ningún día de presencia física y no consta que presentara declaración de impuesto de renta y patrimonio, ni declaración de ningún otro tipo de impuesto”, plantea la acusación oficial por fraude fiscal.La imputación dice que en esos años vivió mayormente en España con su pareja, el futbolista Gerard Piqué. La Fiscalía de Barcelona dice en la querella que los viajes de Shakira al exterior fueron por cortos períodos debido a compromisos profesionales. Quieren que pague impuestos en España por los ingresos que obtuvo en el resto del mundo.
La cantante Shakira se mudó oficialmente a España por propósitos fiscales en el 2015. Un magistrado evaluará si existe evidencia suficiente para enjuiciarla. Los representantes de la colombiana dijeron que no iban a comentar por el momento.Sin embargo, anteriormente la oficina de comunicación de Shakira aseguró que la cantante “ha cumplido en todo momento con sus obligaciones tributarias y no debe ninguna cantidad a la Hacienda española.
Tan pronto como conoció el importe que según la Agencia Tributaria Española debía abonar, procedió a pagarlo en su totalidad y, por tanto, actualmente no existe ninguna deuda.
Las acusaciones de evasión fiscal, llegan a unas semanas de que Shakira terminara su gira mundial “El Dorado”. Foto: AFP
Aquel comunicado también explica que el caso de Shakira es “único al ser una ciudadana extranjera en España cuyos ingresos proceden en su práctica totalidad (96%) del extranjero” y que su actividad profesional es “muy intensa” y fuera de nuestro país, por lo que “su estructura familiar es muy diferente a los modelos convencionales”.
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