Toy Story, debe ser una de las películas animadas que revolucionó por completo a la industria de este tipo de producciones.
Gracias a su llamativa visual y a los carismáticos personajes, logró lo imposible y se posicionó como una de las sumamente favoritas.
Con el paso del tiempo, esta abrió la puerta a todo tipo de cintas relacionadas a temáticas similares o por lo menos con los mismos efectos.
La saga cuenta con cuatro filmes, en los que se muestra la perspectiva que tienen los juguetes cuando juegan con sus dueños.
Sin embargo, hay uno de ellos que muestra una parte más oscura de todo este proceso, el cual tiene que ver con el desecho de ellos.
Se trata de la tercera entrega, donde un oso malvado de peluche es el antagonista, causando mucho impacto en los espectadores.
En base a esta parte, existe un supuesto final que estaba planeado, el cual terminó siendo descartado pero le hubiese dado un toque más cómico a todo.
¿De qué se trataba este feliz desenlace de Toy Story?
Cómo muchos recordarán, cuando se termina esta trilogía inicial, Andy, crece y se va a la universidad, por lo que debe dejar a sus juguetes.
Esto es lamentable para todos ellos, puesto que se acostumbraron al buen trato del joven dueño. Lamentablemente terminan por accidente en los desechos que este personaje había ordenado, por lo que creen que todo fue intencional.
Al final de esta, aceptan el despojarse de él, para dar paso a vivir con una pequeña niña que estaba en una guardería. Dando a entender que todo ciclo tiene su fin.
Recientemente, según Mundo Deportivo, se reveló que para que no fuese tan triste, se pensó en que tanto Woody como sus compañeros, buscaran sin cesar en quedarse con Andy.
Para ello se montarían en vehículos para alcanzar al humano que se iba en su propio auto.
“Al final de la película se dieron cuenta de que Andy se iba a la universidad en unos diez minutos y no tenían tiempo de llegar a la casa. Para poder llegar deciden coger un coche, una moto y un avión de juguete. Cuando todos se montan en sus respectivos vehículos se dieron cuenta de que controlaban los diferentes a los suyos. Al final todo es una especie de carrera cómica hasta el final donde tienes un reloj en contra tuya, mientras Andy está a punto de irse a la universidad. Los juguetes se estrellan contra la habitación de Andy justo cuando él sube las escaleras, y encuentra sus juguetes allí antes de irse”, indicó Michael Ardnt.
Después de todo se quedaron con la otra versión, que terminó tocando los corazones de quienes crecieron con Toy Story.
