El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo este domingo que quedan “abolidos” en el país “el modelo neoliberal y su política económica de pillaje, antipopular y entreguista”.
Al participar en el foro para elaborar el Plan Nacional de Desarrollo, el mandatario federal mencionó: “para nosotros ya se terminó con esa pesadilla que fue la política neoliberal. Declaramos formalmente, desde Palacio Nacional, el fin de la política neoliberal”.
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López Obrador mencionó que “el mercado no sustituye al Estado”. Acusó que algunos “tecnócratas” siguieron esa idea en el pasado, olvidando que el Estado tiene una responsabilidad económica, social y política, de mejorar las condiciones de vida de la gente e incluso conseguir la “felicidad” del pueblo.
La idea de que el mercado pueda sustituir al Estado, insistió, “fue una patraña” para imponer la política neoliberal.
“Debemos demostrar que la modernidad puede ser forjada desde abajo, y sin excluir a nadie, y que el desarrollo no tiene por qué ser contrario a la justicia social”, dijo López Obrador.
Al hablar sobre la abolición del modelo neoliberal, el presidente dijo que ahora se enfrenta la responsabilidad de construir un modelo alternativo, una política “posneoliberal”, que sea viable para el desarrollo económico y que incluso sea inspiración para otros pueblos.
Dicha política posneoliberal, dijo, debe guiarse por diferentes conceptos, entre ellos la honradez y la honestidad, que haya crecimiento de la economía pero también distribución de la riqueza, que haya igualdad sustantiva entre hombres y mujeres, y que se trate con dignidad a todos, incluyendo a jóvenes y a adultos mayores.
Otros conceptos, agregó, son que se rechace toda forma de discriminación, sin importar la orientación política o sexual de la gente; el considerar que la paz es fruto de la justicia, y que la migración de los habitantes del país sea opcional, y no forzada por la falta de oportunidades.
En la parte final de su discurso, también defendió mecanismos como la consulta popular o que se pregunte a la gente si quiere revocación de mandato, tema que ha estado en el centro del debate, ya que los partidos de oposición acusan a López Obrador de querer usar esa herramienta para promocionarse electoralmente en los comicios intermedios.
El Plan Nacional de Desarrollo, dijo, debe elaborarse tomando en cuenta las necesidades de la gente, sin guiarse por recetas extranjeras, que beneficien solo a una minoría.
“Se enviaban recetas desde el extranjero, de las llamadas reformas estructurales, desde allá se definía la agenda nacional y se imponían las políticas públicas, porque al final eran políticas que iban dirigidas a garantizar el bienestar de las minorías y marginar a la mayoría de nuestro pueblo”, expresó.
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